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sábado, 7 de septiembre de 2019

La utopía está en el horizonte....

Es domingo 1 de setiembre, amaneció soleado en Montevideo, pero frío. Típico de esta altura del año donde la primavera le "pulsea" los días al invierno. En el salón, los nuestros, los anfitriones, poniendo todo a punto esperando el arribo de las visitas.

Hace poco más de un mes al club le llegó una propuesta: nos proponían para organizar un torneo en el renovado y emblemático castillo del Parque Rodó.
La idea por supuesto nos encantó y fue así que casi sin pensarlo echamos los remos al agua con mucho entusiasmo y ganas, sabedores de que no son muchas las chances de poder contar con lugares y personas que nos abran las puertas para llevar a cabo actividades.
En las sucesivas reuniones de coordinación, entre mensajes de texto, emails, confirmaciones, descartes y demás pormenores, recibimos con sorpresa y entusiasmo la noticia de que desembarcarían y serían parte de la actividad una delegación de la vecina orilla, nada más y nada menos que del Club Obras Sanitarias!
Fue así que tuvimos que reformular y redoblar esfuerzos, pues lo que pensábamos sería un torneo clásico local se transformaba en un torneo internacional con renombrados actores  que no solo elevarían el Elo promedio si no la cantidad de jugadores estimados.
Pero cuando aun no terminábamos de digerir la buena nueva, como si fuera algo obvio que no alcanzamos a visualizar, teníamos encima de la mesa la propuesta de enfrentarlos en un match amistoso!!

Es Domingo 1 de septiembre, nos dirigimos rumbo al club, y cuento con el privilegio de acompañar a Simón, Alex, Emanuel y Franco , haciéndoles un tour por la rambla montevideana. Pienso, mientras ellos conversan y les hago como de guía turístico, la maravillosa oportunidad de poderlos recibir en nuestra casa, de poder contar con tanto talento.

Y me surgen interrogantes:
¿A cuenta de que?
¿Por qué somos de hacer estas locuras?
¿Qué nos aporta realmente?
Madrugar el domingo, mover mar y tierra, sillas y mesas, armamos, desarmamos, armamos y volvemos a desarmar, corremos, llevamos y traemos...
¿Y si sacamos cuentas?
Mejor no!
En el otro coche llegan Anahi, Nancy, Denise y Vanessa, otro montón de talento.
Más tempraneros nos esperaban ya arribados Alejandro y Luis pilares de Obras, todos unas personas entrañables, queribles, humildes, generosos, comprometidos con su club y el ajedrez.
Y volví a repensar: la locura no era solo nuestra!!
¿Y ellos? Que venían de tan lejos.
¿Que los mueve?
¿Que les deja esta visita?
En fin, un torneo de partidas rápidas y un match amistoso contra un rival evidentemente inferior.
¿Que les aporta?
¿Que nos aporta?
Entre los visitantes y los locales, entreverado veo a Víctor Rodríguez Mendieta, ¿otro mas que perdió la cordura ?
El fue contacto, enlace ,y forjador de la idea ,nosotros solo la echamos a andar.
Cuantas horas invertidas y fuera de casa, reuniones ,llamadas ... ¿para qué?

Mientras tanto Eduardo y Jairo "calentaban", Jorge, Martín se aprestaban a tomar sus lugares, Liber, Pablo y Rafael daban una mano en los últimos detalles... Camila, Franco y Nicolás impacientes por que comenzara el enfrentamiento... ellos serían nuestros 10 defensores .

 

Un poco de ajedrez social antes de la partida
Vanessa Descarrega y Nancy Flores

Nicolás Kulik vs Alejandro Sass

Son las 16 hs... Pronto la visita se tiene que retirar.
Compartimos ajedrez, tomamos mate, almorzamos juntos, ¡e inclusive festejamos un cumpleaños !
Y al fin entendimos que todo esto lo hacemos por y con amor a este juego... ¿si no por que?

Sin pensar en cuanto nos cueste, si el momento vivido valdrá la pena!!
Nadie se lleva más que el recuerdo de haber compartido una jornada agradable y el compromiso de volverlo a repetir, la fortuna estuvo en recibirlos y estrechar lazos para que en un futuro no tan lejano poder llevar a cabo intercambios y por que no, pensar en algún torneo que revitalice las dos orillas de ajedrez.
El resultado final? Fue lo de menos!

La respuesta la encontré más tarde volviendo cansado a la noche, rumbo a casa, cuando al pasar por la que fuera la casa de Eduardo Galeano y  cuando el 3 de este mes hizo fecha de su nacimiento, recordé una de sus frases:
"La utopía está en el horizonte.
Camino dos pasos y ella se aleja dos pasos.
Camino diez pasos más y el horizonte se desplaza diez pasos más.
Por mucho que camine nunca la alcanzare.
Entonces ...  ¿para qué sirve la utopía?
Para eso: sirve para caminar."

Y en eso estamos... andando el camino!

A todos muchas gracias por estar!!
 


Acá podes ver toda la información sobre el encuentro.








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