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viernes, 28 de septiembre de 2018

Seis horas y media de tensión, drama y emoción

Es muy probable que hoy la WCM Natalia Silva haya jugado la partida más extenuante, emotiva, dramática y apasionante de su carrera.
WCM Natalia Silva, guerrera destacada de la jornada
Volveremos a ella más abajo en la crónica.

Antes corresponde destacar el muy buen resultado obtenido por los muchachos del Absoluto ante Panamá.

Con un solvente triunfo del GM Andrés Rodríguez de negras y del IM Luis Rodi de blancas Uruguay se aseguraba por lo menos el empate del match, pero las fuerzas del equipo estaban para más.



En el tablero 2 el IM Bernardo Roselli trabajó su partida con paciencia, esmero y sin soltar el acelerador, como es su estilo, y estuvo mejor buena parte de la contienda.



Llegado un final de torre del uruguayo contra alfil del panameño, la posición no daba para mucho más y ambos acordaron un empate y el match terminó en favor de Uruguay por 2.5 a 1.5, ya que en el tablero 3 el proísta FM Nicolás López cayó esta vez de negras luego de librar una resistencia épica.

Hasta la jugada 100 llegaron los intentos de Nico por salvar una partida que muy poco a poco se fue decantando en favor del centroamericano pero que finalmente no fue posible igualar por parte del proísta.



De todas maneras se trata de un excelente resultado para el Absoluto, que necesita recuperar la confianza para encarar la segunda mitad de esta Olimpiada con toda la energía posible ya que grandes cosas se pueden lograr aún.

Panamá vs Uruguay
FM Sanchez Alvarez, Roberto (2391) 0-1 GM Rodriguez Vila, Andres (2477)
IM Baules, Jorge (2358) 1/2-1/2 IM Roselli Mailhe, Bernardo (2439)
Ramos, Efren Andres (2244) 1-0 FM Lopez Azambuja, Nicolas (2322)
FM Tapia, Alexei (2193) 0-1 IM Rodi, Luis Ernesto (2308)

Mañana día de descanso.

Próximo rival: Suecia (32) el domingo desde las 8 AM

La batalla de tu vida


Durante seis horas y media y 162 movimientos, la uruguaya, que planteó una Alapín ante la Siciliana de su rival, buscó por todos los medios posibles hacer rendir una ventaja que obtuvo temprano en la partida.

Ya desde la jugada 24 su posición queda inmediatamente mejor tras una imprecisión de su rival, que elige (o no ve) una secuencia en la que Natalia queda con dos piezas menores por la torre y un peón explosivo del que la de Sri Lanka deberá encargarse de neutralizar de aquí en más.
A partir de este momento el resto es una de esas historias que confirman que el ajedrez es, en esencia, la guerra pacífica del espíritu humano por excelencia. Un espejo cósmico en el que la ambición, la estrategia, la debilidad, el orgullo, la resiliencia y quién sabe cuántas cosas más proyectan sus rayitos para componer un caleidoscopio que, simbólico y único, contiene en sus trazos y colores todo lo que nos integra, todo lo que nos hace humanos.

Una verdadera montaña rusa de movimientos (¿sentimientos?) se suscitó y un final que duró unos 130 movimientos mantuvo en vilo a Uruguay, que desde las pantallas de cada dispositivo móvil, de cada computador, asistían a un espectáculo de emociones fuertes y vuelcos inesperados a todo momento.

Ranasinghe (así se llama la muy meritoria rival que tuvo hoy Natalia) jugó con gran aplomo y a pesar de la desventaja jamás tiró la toalla sino que, por el contrario, complicó las cosas todo lo que las cosas pueden ser complicadas.

Natalia no se quedó atrás y fue, de a poco, consolidando su ventaja y preparando el avance de su peón a, que era uno de los puntos desequilibrantes de su posición.

Sin embargo las cosas no resultaron todo lo bien que la uruguaya seguramente esperaba y el final empezó a inclinarse hacia una definición de alfil y caballo.

Durante decenas de jugadas la charrúa maniobró y rebuscó en la posición alguna forma de hacer avanzar su peón hacia la zona de coronación pero la de Sri Lanka defendía todo lo que había que defender.

Aunque los motores de análisis la dieron siempre como favorita a la de nuestro país, cuando uno lleva seis horas y media de batalla campal intelectual y se encuentra jugando con muy poco tiempo es muy difícil pasar por alto las mejores jugadas.

Ya sobre las 14:40 de nuestro país (21:30 de Batumi), y luego de haber intentado todo lo que estaba a su alcance y de haber echado mano a todos los recursos de los que disponía, Natalia no pudo encontrar la manera de ganar y la división de honores dio un cierre salomónico.


 

Un empate que nos deja bien ubicados

En los encuentros de las otras integrantes del equipo Femenino la WFM Patricia De León la peleó y la peleó hasta que luego de más de 70 jugadas firmó unas tablas con su rival.



Hoy en el tablero 3 vimos lamentablemente la primera derrota de la proísta WFM Andreína Quevedo, que de negras y con una India de Rey no logró desarrollar su juego como ella hubiese querido.

La iniciativa de la partida quedó poco a poco para su rival, que la aprovechó y tejiendo redes de mate sobre g7 finalmente sacó una ventaja indescontable por la uruguaya, que más allá de la cída viene cumpliendo una fantástica actuación.



Buenas noticias para la WCM Lucía Malán, que volvió a jugar una partida inspirada y, por segundo día consecutivo, termina su jornada con una victoria en su haber.



Con su medio punto el Femenino redondeó un buen empate ante una selección que, aunque levemente peor preclasificada, demostró gran fuerza sobre los tableros.

En este momento el equipo se ubica en el lugar 69, con lo que mejora en varios puestos su preclasificación inicial (84).

Sri Lanka vs Uruguay
WFM Premanath, Dinushki (1813) 1/2-1/2 WFM de Leon, Patricia (1929)
WIM Ranasinghe, S D (1785) 1/2-1/2 WCM Silva Rosas, Natalia (1833)
De Silva, Tenara (1764) 1-0 WFM Quevedo, Andreina (1809)
WCM Jayaweera, Sayuni Gihansa (1655) 0-1 WCM Malan, Lucia (1785)

Próximo rival: Mónaco (75)

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