En este siglo XXI en que los ajedrecistas se convierten en grandes maestros cada vez más jóvenes, y se escala a la elíte a edades cada vez más bajas, llegando incluso a plantearse seriamente cual es el momento de la vida en la que se está en la plenitud para el ejercicio de este maravilloso juego, el participante de más edad en este match de candidatos es el que obtiene el único y preciado lugar para enfrentarse al actual campeón del mundo.
Además, de los mejores cien en la lista oficial, también es el de mayor edad Boris Gelfand, que ahora y llevando la contra a quienes piensan que pasando los cuarenta el declive es notorio, chocará con el mejor del planeta tan solo dos años menor que él, y tercero en la lista de longevos dentro de los top-100.
Esta sexta partida era la última que quedaba de la serie, antes de que los relojes se marcaran con menor cantidad de tiempo, y el israelí tenía claro que Alexander Grischuk moviendo rápido sus manos es prácticamente invencible.
Entonces había que quemar las naves y asi lo hizo, en una partida en la cual se movió en terreno muy conocido y aparentemente poco preparado por el ruso, consumió muy poco tiempo en hacer todo lo correcto mientras que el veloz gran maestro llegó a disponer de tan solo 9 minutos de tiempo.
Esto provocó algún error que el israelí supo aprovechar a la perfección y antes que la jugada 40 fuera escrita en las planillas, se sabía cual era el nombre del retador.
El plan de Alexander falló en la orilla de la alegría, y Borís demostró que la experiencia sirve y se cotiza en alza.
Para ver la partida pulsar acá
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