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viernes, 11 de septiembre de 2009

Otra vez el Cottagge nos deslumbró a todos

Como viene sucediendo año tras año, nuevamente el hermoso hotel situado en el barrio de Carrasco fue el que albergó a decenas de ajedrecistas que se acercaron para disfrutar de una tarde a puro escaque y trebejos.

Y la buena organización, la calidez de Jörg P. A. Thomsen, su anfitrión, son detalles que no se olvidan y que hizo que muchos dejaran por un rato la pasión futbolera y asistieran nuevamente a un evento que como siempre los deja por demás conforme.

Algunos, como ya es costumbre, se saltearon el anotarse previamente y fueron directamente a la calle Miraflores. Siempre se les busca lugar para que nadie quede afuera pero claro esos detalles hicieron que el torneo demorara en arrancar... ¡casi una hora!

La sagacidad, experiencia y el brillante desempeño de la pareja arbitral (Hipogrosso-Gilmet) hizo pasar casi desapercibida la demora inicial, ya que con el devenir de las rondas todo funcionó de forma por demás ágil y coodinada.



La actividad contó con innumerables obsequios por parte de los organizadores que obviamente fueron muy bien acogidos por todo el público en general. Desde panchos hasta chocolates, fueron degustados por los ajedrecistas de la sabatina tarde invernal.
El torneo se dividió en cuatro categorías: rankeados superior a 1900 elo, rankeados menor de 1900 elo, no rankeados adultos, no rankeados sub-16.
La categoría principal dejó cosas para el recuerdo.


Tablero de por medio volvieron a enfrentar sus talentos dos pesos pesados del ajedrez nacional, nada menos que dos ex-campeonaes uruguayos Pedro Lamas y Alejandro Bauzá.


El primer y segundo ubicados en la tabla de colocaciones finales fueron dos proístas, Martín Areán, el príncipe y Federico Viñas, el rey, y vaya que tuvieron cortesanos en esa corte.


La categoría que nucleaba a los sub-1900 tuvo como galardonado en primer lugar a un representante de Inglaterra, quien juega en su país de origen y no quiso dejar pasar la posibilidad de despuntar el vicio entre nosotros. En el puesto 2 y 3 también hubo compañeros del club: Santiago Bertucci y Mathías Llabrés.


La categoría de los más pequeños fue en la que se proclamó vencedor Marcos Britos, joven participante del taller Los Bulevares, llevado adelante por Guillermo Uria. Nuestra joven proísta Lucía Hernández terminó en la primera ubicación pero no se llevó la primera colocación por sistema de desempate.


Sin dudas una actividad para seguir acompañando todos los años, por lo que esperamos que Jorg siga apoyando desde ese lugar y con este torneo la difusión de nuestro más noble juego.

1 comentario:

  1. Muy linda nota en la que se muestra lo que es ese grato encuentro anual.

    Con respecto a la categoría de menores no ranqueados, fueron 4 los que terminaron con idéntico puntaje (4 puntos) pasándose luego a definir por sistema de desempate. Según recuerdo Hipogrosso había dicho que primero era enfrentamiento directo, lo que implica que en un múltiple empate todos hubiesen jugado entre sí, o al menos uno le hubiese ganado a los otros tres. No era el caso, por lo que seguía el Progresivo. Ello determinó los lugares.

    En ese primer lugar compartido, entonces surgieron jugadores en un cierto orden, encabezado por Marcos, que seguramente el año que viene ya estará jugando en otra categoría.

    Pero además de él y de Lucía, estaban Hernán Umpiérrez y Diego Costa.

    Quiero destacar a Diego, también de nuestro Taller de Ajedrez los Bulevares. Mientras que Marcos se acercó al ajedrez hacia el mes de enero, Diego lo hizo hace 4 meses, por lo que su logro resulta -al menos para mí- aún más impactante.

    Pero en cualquier caso, felicitaciones a los 4

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