El domingo pasado vivimos una jornada por demás pintoresca y simpática en el subsuelo de nuestro club al realizarse el "1er Torneo Sub-8 La Proa", cuando 24 chiquitines que apenas levantan una altura considerable del suelo, se dispusieron con sus manitos ingenuas a mover los trebejos de la forma más acertada posible buscando siempre la jugada que le diera la victoria.
Fue una aventura su realización pero una gran satisfacción el resultado obtenido.
Estos niños, algunos con una determina experiencia, (Spektor, campeona nacional, Silva, de familia de ajedrecistas), pero otros que aprendieron a mover las piezas solamente hace algunos meses, fueron capaces de transitar un torneo con el escollo que para ellos podían representar el tener un reloj a su lado que le marcaba 30 minutos para realizar su partida, y una planilla en la cual debían registrar sus jugadas.
Estos niños, algunos con una determina experiencia, (Spektor, campeona nacional, Silva, de familia de ajedrecistas), pero otros que aprendieron a mover las piezas solamente hace algunos meses, fueron capaces de transitar un torneo con el escollo que para ellos podían representar el tener un reloj a su lado que le marcaba 30 minutos para realizar su partida, y una planilla en la cual debían registrar sus jugadas.
¡Y que maravillosa corrección! Absolutamente todos, siguieron adelante con las reglas que el torneo había marcado, y más allá de alguna consulta puntual, nunca hubo nada que llevara al desorden en el salón.
Ellos sabían que estaban en una competencia "como de adultos" y su comportamiento fue de tales.
Obviamente se notó, que primaba en ellos el afán por divertirse y pasarla bien. Las palabras previas con las que fue inaugurado el evento apuntaban a eso, a saber que la vida toda es una escuela en la que aprendemos cosas todos los días y que si ese aprendizaje iba de la mano de la alegría por hacerlo, más allá del resultado circunstancial de un encuentro, todo se vuelve más fácil y entretenido.
Y este domingo, se acercaron a algo nuevo, a manejar esos elementos distintos que se agregaron al partido de ajedrez, y que sin duda los enriquecieron y mucho.
Hay que resaltar por sobremanera, el brutal aporte que le dio a la actividad el profesor Eduardo Salchi, quien con su gran convocatoria entre toda la gran cantidad de alumnos que tiene, sumó y mucho para que la jornada tuviera todo el color que finalmente tuvo. Y no solo eso, también debemos destacar, que desde el principio al final, estuvo como uno más de la casa (que lo es)dando una mano en todo donde fuera necesario para que el domingo ajedrecistico transcurriera con total normalidad.
Todos los niños que participaron de esta primera y recordada aventura se llevaron un hermoso diploma en reconocimiento a su gran comportamiento durante toda la jornada, y un objeto para que recuerden a nuestro club.
Los niños que en esa tarde de domingo movieron mejor las piezas y conquistaron más puntos, quedando en las primeras posiciones fueron:
1º- Martín Silva, quien ganó todas las partidas y sumó 5 puntos
2º- Joy Spektor, la campeona nacional, llegó líder hasta el final y solo cayó frente al campeón.
3º- Mateo Cancela, muy serio y talentoso, y por si fuera poco, le queda un año en la categoría
4º- Francisco Martínez, con una actitud sumamente madura frente al tablero
5º- Nadia Silva, una niña con condiciones realmente para admirar y observar.
Mejor femenina: Jimena Burastero, metódica y pensativa la niña del Solís de Las Piedras.
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