Anaclara Costa durante una de las rondas, en Tromso. Foto: sitio oficial. |
Era una incógnita la manera en la que ella iba a desarrollar su juego, así que fue una partida lenta para mí. Cuando encontré un plan lo empecé a desarrollar, pero tuve dificultades ya que jugué mal la apertura. Pero al momento del "rock and roll" , con esto me refiero a la ruptura y acercar las piezas al rey, quedé muy apurada de tiempo y pasó lo que pasó. En el tablero me sentí con mucha ansiedad por poder desarrollar mi plan pero al haber fallado me generó una decaída terrible, ya que podría ser mi última partida llevando la celeste.
¿Cómo te venís sientiendo en tu juego a lo largo de todo el torneo?
El ritmo de la Olimpíada es intenso, y así lo vivo cada minuto. Tenemos una rutina, preparación, juego y análisis. También con las chicas tenemos una rutina de cábalas, lo cual le da un toque de diversión a los nervios previos de la partida.
¿Cómo ves al equipo para encarar la recta final del torneo y qué expectativa se han formado con respecto a cuál puede ser la clasificación final?
Al equipo lo veo con mucha garra charrúa, así somos y así lo vivimos, dejando todo en la cancha y con sentimiento de equipo. En cuanto a las expectativas, siempre es tratar de llevar a nuestro país a lo más alto, pero en mi opinión ya lo hemos hecho, más allá de los resultados, en las partidas mismas, porque de eso se trata: de la belleza de jugar ajedrez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Solo publicamos comentarios firmados con nombre y apellido.