..."No maldigas la oscuridad, enciende la luz.."

Construyó la casa.
Le dio vida.
Levantó sus paredes y la hizo confortable.

Luego nos miró a todos con la llave en la mano y abriendo la puerta nos dijo:..." entren, es de ustedes, habítenla, úsenla, disfruten de cada uno de sus rincones y sientanla como propia, porque así lo es, yo simplemente abrí la puerta, de aquí en adelante todo puede ser compartido..."


Un espacio donde discutir el ajedrez con nombre y apellido no esté negado a nadie, un lugar donde construir desde la discrepancia o el asentimiento tenga la meta siempre de la suma y jamás de una resta.

Porque este ajedrez oriental, tan diminuto en números, tan pequeño en volúmen de gente, con tan pocos clubes a lo largo y ancho de su territorio, tan insignificante para la vida  de un país que lo tiene como uno de los más pequeños dentro de los deportes menores,  tiene dentro de esos pocos centenares de locos amantes del tablero, a algunos que todavía creen en la quimérica idea de voltear esta realidad, descubrirla, llegar hasta el fondo de sus raíces, para encontrarle la verdadera vuelta y cambiar la pisada y revertir para bien de todos  esta actual situación,  que dista y mucho del sueño que poseen los que con corazón noble dan todo su esfuerzo para que el futuro sea muy distinto al presente.

Y así hoy, Federico Viñas, el Fede para nosotros, nuestro compañero de club,  el marino del mismo barco, y por sobre todas las cosas el gran amigo,  abre esa puerta que sin dudas significará trabajo, dedicación y esmero, y que  llevará como meta la superación,  que será producto del análisis, la investigación y el descubrimiento.

Por eso desde aquí, deseamos que ese tablero de papel sirva para que sobre él se escriban aquellas cosas que a todos nos enriquezcan, y nos nutran con miradas u opiniones distintas, que ese papel sirva para que varias plumas tengan a bien de trazar sus líneas sobre él, para que el espacio de difusión se enriquezca para el bien de todos, pero ante posibles vientos, huracanes o quizás alguna brisa sorpresiva, nos gustaría que dejara de ser papel para convertirse en el más duro material para que resista el paso del tiempo y nos congratule a todos con su larga existencia.

Salú Fede! Estamos contigo!